martes, 8 de abril de 2008

Agonia

Te pensé tantas veces, te creí aun en tu silencio
y me cegué a que no me mentías aun cuando
jurabas por Dios con la mirada en el suelo y los
dedos cruzados.
Estreche tus manos y mis esperanzas creyendo
que algún día me amarías.
Bese tu alma, tu vida, tus errores con los ojos
cerrados y cegados de amor, de amor que te imploraba
que correspondieras y aun con mi dolor, mi tristeza
y mi desamor me quede contigo, a tu lado esperando
en silencio, en un silencio que se hacia hueco y doloroso
hasta que la agonía llegò, entonces tomando contigo tus
falsedades te marchaste y tu partida sin retorno dio
paso a mi agonía y mi pronta muerte.

No hay comentarios: